La figurita

El Preparador Físico: ¿aliado o.......?

Siempre hablamos del trabajo en equipo,que debería ser multidisciplinario, interdisciplinario, interactivo, etc, etc, etc..... Pero como Entrenadores, ¿cuáles son los criterios que manejamos para armar nuestro equipo de trabajo, sostén para la cristalización del proyecto de temporada con nuestro equipo?

Y si ya hablamos del trabajo en equipo, ¿qué pasa con el Preparador Físico?
Conceptos tales como profesionalidad, honestidad, LEALTAD, fidelidad, deberían jugar un papel preponderante a la hora de su elección.

Si lo conocemos de experiencias anteriores, esta tarea se verá simplificada. Si no es así, pues corremos cierto riesgo.

Esto en el tema estrictamente personal, pero.....¿y en el tema profesional?

El JEFE del equipo de trabajo es el Entrenador (esto lo tenemos claro); por lo tanto, poseer los conocimientos suficientes para poder entablar una conversación con el PF en términos técnicos-profesionales, nos implica una ventaja para nuestro propio trabajo que debemos aprovechar al máximo.

El PF es un compañero de trabajo, encargado de la parcela física del equipo (ésto también lo tenemos claro); ahora, si delegamos a nuestro compañero de ruta todo el apartado físico y nos deslindamos de toda la responsabilidad en lo que a su trabajo se refiere, aumentamos los riesgos y la posibilidad de no lograr los objetivos planificados.

Es necesario revisar continuamente y a diario el trabajo a realizar, el realizado y lo que vendrá.

Supongamos que poseemos jugadores con las características necesarias para utilizar cierto sistema de juego y practicar las acciones tácticas correspondientes; pues para ello, deberán estar fisicamente (entre otras cosas) preparados para plasmarlas sobre el campo de juego.

Y aquí llegamos al punto urticante: elaborar una planificación conjunta, integrada, con un alto grado de especificidad, en la cual se contemple el sistema o sistemas a emplear con sus variantes a imprimir al juego.

Nuestros requerimientos técnicos-tácticos deberán ir sostenidos por la capacidad física de nuestros jugadores. Equipo que juega a la contra y las cargas de trabajo se focalizan fundamentalmente en el entrenamiento aeróbico, "empastando" al equipo, dificilmente logre jugar de tal forma.

La coordinación entre todos los componentes del equipo de trabajo resulta imprescindible en nuestro equipo de trabajo técnico-profesional, y nosotros, como Jefes del mismo, debemos cuidar que ésto funcione así.

Y si llegamos a un equipo con el grupo de colaboradores directo contratado por el club directamente, recemos, seamos optimistas e intentemos que ....... jueguen en nuestro equipo!